Del 13 al 17 de junio estuvimos en "El Remolino" un centro que se encuentra en Cazalla de la Sierra que es un pueblo de Sevilla.
Saliendo de Ceuta íbamos muy ilusionados por los días que pasaríamos allí, no nos dio ninguna pena decirle adiós a nuestros padres porque los días pasan volando.
Cuando llegamos nos enseñaron todas las instalaciones, merendamos pan con chocolate y todos nerviosos nos fuimos a organizar nuestras maletas y a hacer las camas.
Estábamos en el primer piso y eran literas, habían seis u ocho camas por habitación y tenían nombres de animales o vegetales ya que el centro es un aula de la naturaleza, con mucho respeto por el cuidado del medio ambiente.
Nos llevamos una gran sorpresa con la comida, ¡era riquísima!, hubo días que algunos se comieron tres platos de lentejas, de patatas guisadas o de sopa de fideos. Comidas que en casa ni la probamos allí nos gustó mucho.
A la piscina íbamos al medidodía, una hora y algo antes de comer, siempre nos pareció corto el tiempo, nos hubiera gustado ir otra vez por la tarde, pero no nos dejaban.
El último día le dijimos a las cocineras que salieran de la cocina, le dimos un aplauso y las felicitamos por lo bien que cocinaban.
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